Que opinan de la cesura de xhámster. ...Ya Tengo 6 meses sin poder subir mis fotos alguien sabe que paso Pročitajte više
****** El Ranchero (12 Parte)
DOCEAVA PARTE Tanto mi papá como Carlos eran sólo un par de fardos tirados sobre la cama. Mi papá boca abajo y el otro, boca arriba. No eran muchas las expectativas que se podía poner sobre ellos en esos momentos. Sólo se oían sus respiraciones ir de mayor a ***** conforme pasaba el tiempo, y yo los observaba. Yo no era muy sentimental que digamos, pero se me hizo muy lindo verlos juntos, ahí y así como estaban, desnudos y exhaustos por haber cogido entre sí. Hacía a penas unos días que ni siquiera se dirigían la palabra y ahora, el semen del hijo estaba adentro del padre... ¡semen!... ¡es ci Pročitajte više
****** El Ranchero (13 Parte y El Final.)
TRECEAVA PARTE……………EL FINAL Resultó que el que gritó atrás de mi papá, o sea, el tío, venía cargado con una botella de Tequila y varios vasos. Se abrió paso entre mi papá y el umbral de la puerta, con una sonrisa muy parecida a la que llevaba cuando íbamos de camino hacía el río a bañarnos; caminó hasta sentarse en su cama y depositar todo en el buró. Dijo: "¡A ver Carlitos!... ¿qué tienes preparado para nosotros los viejos, cabrón?", pero sin voltear a verlo. Mi papá, Carlos y yo nos volteamos a ver y nos reímos, pero la verdad era que tanto Carlos como mi papá estaban muy nerviosos. Pročitajte više
****** El Ranchero (11va Parte)
ONCEAVA PARTE Eso de que no volví a saber de mí hasta el día siguiente, fue cierto sólo en parte. Volví a saber de mí en la mad**gada, que me despertaron las ganas de orinar. Yo estaba en la cama de Carlos (desnudo por supuesto) Carlos en la de mi papá y éste en la mía. Carlos estaba desnudo boca abajo, luciendo su nueva marca de bronceado y descubierto, mostrando su bonito y velludo trasero. Mi papá dormido de lado cubierto con la sábana hasta el ombligo. Pero no había tiempo qué perder, me estaba orinando. Cuando regresé, me puse a contemplar el cuadro, y me volvió a invadir esa felicidad q Pročitajte više
****** EL Ranchero (9 Parte).
NOVENA PARTE Está de más decir que el tema central de conversación durante tooooodo el viaje, fue el sexo. Después de la ruptura de fronteras entre mi papá y yo, ¿y a mis catorce años?... ¡por dios!... ¿quién podría hablar de otra cosa que no fuera S–E–X–O?... yo no. Lo interrogué sobre muchas cosas y en casi todas tuvo la paciencia para contestarme, mismas que acaso vengan a la palestra después; pero una parte que quedó completamente en blanco, fue su ******ia sexual. No quiso hablar de eso y yo no quise presionar, por miedo a que se volviera a erigir el muro de Berlín entre nosotros. Ya n Pročitajte više
****** El Ranchero (10 Parte).
DECIMA PARTE. Al día siguiente, de regreso de la escuela y a la hora de la comida, el único ******** en casa era mi madre. Mi papá llamó para decir que se iba a una comida de negocios y mi hermano que se iba a quedar en el laboratorio. Ambas cosas eran usuales. Así que tuve toda una tarde para olvidarme de mis calenturas y ponerme al día en las cosas de la escuela. En la noche, el primero en llegar fue Carlos y en cuanto oí su voz el corazón empezó a palpitarme con más fuerza. Yo sabía, y tenía por seguro, que la cosa con Carlos no iba a quedar ahí. Después oí que llegó mi santo padre y mi ma Pročitajte više
****** El Ranchero (7ma Parte)
SEPTIMA PARTE Yo no sabía lo que se avecinaba. Ignoraba por completo los placeres de la penetración anal, así que cada instante que pasaba con el glande de mi papá atrapado en mi esfínter, era ya una gran experiencia. Es cierto, sí sentí algo de dolor, pero fue un dolor muy extraño, era uno que no quería suspender pero que finalmente cesó porque mi papá me dijo que me quedara inmóvil un momento, respirando tranquilamente, para dejar que mi ano se acostumbrara a su presencia. Y se acostumbró. Yo estaba agachado, con las manos apoyadas sobre la cama, sentado a horcajadas sobre él, esperando el Pročitajte više
****** El Ranchero (8 parte)
OCTAVA PARTE Después de haber tenido a mi papá adentro de mí esa noche, no tengo otro recuerdo que el de la mañana siguiente. Fue la primera vez que disfruté del inmenso placer de caer rendidamente dormido después de coger. Lo primero que arrebató mi mente esa mañana, fueron las ganas inmensas de orinar. Sin pensarlo, me levanté, corrí al baño y para no perder tiempo en preámbulos, me senté y me dejé drenar ************* de la gravedad. Mi intestino también se sintió invitado a desalojar lo que no necesitaba y ahí fue cuando me reconecté con la noche anterior: ¡qué pinche dolor! Era un dolor Pročitajte više
****** El Ranchero (5TA Parte)
QUINTA PARTE Después de un recuperarme un rato sentado en el jeep, entré a la casa y me acomodé en la cama (me sabía solo en el rancho porque los domingos se van todos los empleados en cuanto termina la ordeña). De pronto me había invadido el sueño. Me despertaron las botas de mi papá y mi tío. ¿Cuánto tiempo había pasado? No tenía ni idea. Me levanté y salí a saludar. En vez de saludar, mi papá me preguntó si ya tenía mucha hambre y se metió a la cocina; mi tío me dio una nalgada y caminó rumbo al baño. Ambos, como si no hubiera sucedido absolutamente nada. Aquello se iba a poner divertido. Pročitajte više
****** El Ranchero (6TA Parte).
SEXTA PARTE Todavía se oían los ruidos de mi tío en el baño. Después de que terminó de secarme, mi papá se sentó junto a mí en la cama, un poco por acompañarme, un poco por descansar también. Y me pregunta en voz baja: - ¿Cómo te sientes hijo? - ¡Muy bien Pá! - Baja la voz... - Ok... Muy bien Pá. Muy contento. - ¿Seguro? - Seguro Apá. - Bueno, entonces me estoy tranquilo hasta que lleguemos a la casa y podamos platicar largo y tendido sobre todo esto, ¿está bien? - Está bien Pá. - Bueno, ¿ya te quieres dormir?, ya es algo tarde. - Sí... pero... - ¿Pero qué? - ¿Ora no me vas a dejar dormir co Pročitajte više
****** El Ranchero (CUARTA PARTE )
CUARTA PARTE El jadeo de mi papá era demasiado fuerte como para que el tío pudiera seguir dormido, que estaba a unos metros. Se oyó su voz ronca, adormilada y asustada: - ¡¿Qué pasó manito?!... ¿estás bien?... ¡a ver!... deja prender la luz (todo alarmado). - ¡No...No...No!... ¡no la prendas!... el niño está dormido. No quiero que lo despiertes. ¡Nomás tuve una pesadilla, hombre!... eso es todo. - ¿Eso es todo?... ¡¿por una pinche pesadilla tanto cabrón escándalo?! - Que sí necio, ya duérmete. Soñé que me caía una auditoria del gobierno. Yo ahorita me recupero y me vuelvo a dormir. - Pročitajte više
****** El Ranchero 2da Parte.
SEGUNDA PARTE Después de que me dijo que si me lo había aprendido bien eso de darle un beso a una verga, para hacérselo luego a él, quise protestar, pero la verdad es que no podía ni pensar, ya no digamos protestar. Me quedé tendido a lo largo del tronco con los ojos cerrados, tratando de recuperar la respiración así como la cordura: ¿qué acababa de suceder ahí? Pero no tuve mucho tiempo. El tío empezó a aventarme agua, jugando: "¡Arriba huevón!... que no es hora de dormir". Me enderecé y me quedé sentado justo como estaba él antes, pensando. Todo el espacio cerebral que antes había t Pročitajte više
****** El Ranchero 3ra. Parte
TERCERA PARTE Los recuerdos que me quedan de los minutos siguientes después de que terminaron los gemidos de mi papá (sus rugidos de león acallados) fueron sólo sonoros porque seguí con los ojos cerrados y muy apretados por el escozor del jabón y porque no estuve dispuesto a interrumpir el momento por la humedad del jabón: el ruido del agua que caía de la llave mal cerrada, los latidos portentosos de su corazón directos en mi oído, así como su respiración agitada. El sonido de los grillos que entraba por la ventana que estaba abierta. Finalmente me fue soltando poco a poco, y como si Pročitajte više
****** El Ranchero.
PRIMERA PARTE Mi historia es corta pero verídica. Duró sólo un fin de semana. Sucedió hace muchos años, cuando yo tenía 14 años y fui con mi papá al rancho. En el rancho, en la casa grande, vivía sólo mi tío, los empleados trabajaban por jornales, así que siempre estaba solo una vez dada la hora de salida. Llegamos el viernes por noche y al día siguiente salimos a caballo a uno de los clásicos recorridos que acostumbraba mi padre para verificar que el ganado y las cercas estuvieran bien. Creo que antes de continuar debo describir a mi tío. Yo era un niño de 14 años de lo más normal, a Pročitajte više